Tal día como hoy, el 23 de agosto de 1908, nació en la ciudad de Olomouc (Moravia) la artista checa autodidacta Anna Zemánková.
Está considerada una de las artistas del Art Brut más importantes del mundo. Su obra forma parte de las grandes colecciones internacionales de arte marginal como el LAM Lille Métropole Musée d’art moderne, d’art contemporain et d’art brut, la colección privada ABCD de Bruno Decharme en París o el Museo de la Collection de l’Art Brut de Laussanne, donde se celebró una gran exposición retrospectiva de Anna Zemánková en 2017.
Anna vivió la mitad de su vida dedicada a su empleo como técnico dental y a la crianza de sus hijos, el primogénito murió de cáncer con sólo cuatro años.
Después de la Segunda Guerra Mundial, la familia se mudó a Praga donde Anna comenzó a sufrir largos episodios de depresión. Para combatir esta enfermedad, uno de sus hijos, el escultor Bohumil Zemánek (1942-1996), le aconsejó utilizar la práctica artística de manera terapéutica y Anna comenzó a dibujar con 52 años. Según sus propias palabras, el proceso creativo le permitió adentrarse en un mundo paralelo más gratificante que el mundo real, donde sentía que unas fuerzas magnéticas la embargaban a la hora de dibujar, en un estado de trance similar al que sienten las médiums espiritistas.
Sus trabajos son imaginarias representaciones orgánicas de seres híbridos detalladamente dibujados, como si fueran estudios morfológicos botánicos o entomológicos. Con el tiempo fue incorporando a sus dibujos pequeños materiales en forma de collage y labores textiles.
En 1979 participó en la primera gran exposición dedicada al arte marginal titulada “Outsiders”, celebrada en la Hayward Gallery de Londres.
En la década de los años 80, la diabetes que padecía empeoró y tuvo que someterse a la amputación de sus dos piernas.
Durante sus últimos tres años de vida estuvo recluida en una residencia para ancianos, donde no renunció a su trabajo artístico hasta que falleció el 15 de enero de 1986 con 77 años.
Tras su muerte, el reconocimiento a su trabajo ha ido en constante aumento gracias a la intervención de la Cavin-Morris Gallery de Nueva York, que desde 1993 ha gestionado casi 40 exposiciones de sus obras. En 2013, los dibujos de Anna Zemánková formaron parte de la 55 Bienal de Venecia comisariada por Massimiliano Gioni bajo el título “El Palacio Enciclopédico”.
