Tal día como hoy, el 24 de abril de 1889, nació cerca de Moscú la pintora constructivista Liubov Popova.
Está reconocida como una de las figuras más sobresalientes dentro de las vanguardias rusas de principios del siglo XX. Fue una creadora tremendamente experimental y audaz.
A lo largo de su corta carrera artística, exploró en sus obras el movimiento cubo-futurista, el suprematismo y el constructivismo.
Comenzó a los 18 años tomando clases de pintura con el pintor impresionista polaco Stalislav Zhukovsky (1873-1944). En 1913, Popova viajó a País con un amiga, la pintora Nadezhda Udaltsova (1885-1961), para estudiar en la Académie de la Palette, donde ambas descubrieron el movimiento cubista de la mano de los directores de esta escuela, los pintores Henri Le Fauconnier (1881-1946) y Jean Metzinger (1883-1956).
En 1914 viajó hasta Italia y conoció el Futurismo, cuyos preceptos conjugó con las teorías del cubismo analítico, de tal modo que fue una de las pioneras en adoptar el lenguaje cubo-futurista. Al regresar a su país, se unió al grupo de pintores suprematistas, como Malevich, Aleksandra Ekster y Olga Rozanova, con los que trabajó en la cooperativa de artesanía situada en el pueblo de Verbovka, cerca de Kiev.
Con el auge de la Revolución Rusa, Popova se convirtió en una figura muy activa en la escena política, asumiendo compromisos sociales asociados a la revolución bolchevique. Comenzó a diseñar textiles, posters, publicaciones, escenografías y vestuarios, al mismo tiempo que en su evolución pictórica avanzó hacia el concepto de la no-objetividad constructivista. También fue docente en el Institut Khudozhestvennoy Kultury (INKhUK) y participó en las principales exposiciones vanguardistas en San Petersburgo y Moscú.
Murió de escarlatina con sólo 35 años en 1924.
Sus obras se conservan en el MOMA y el Solomon R. Guggenheim Museum de NY, el Museo Ludwig de Colonia, el Museo Thyssen-Bornemisza de Madrid, la Galería Tretyakov de Moscú, el Museo Estatal Ruso de San Petersburgo, el Museu Coleção Berardo de Lisboa, , el State Museum of Contemporary Art de Stavroupoli (Tesalónica), o la National Gallery of Canada en Otawa.
