Tal día como hoy, el 22 de junio de 1886, nació cerca de Vladimir la artista cubo-futurista y suprematista Olga Rozanova.
Está considerada una de las figuras más relevantes dentro las vanguardias rusas de la primera década del siglo XX. Fue una creadora volcada por completo en la experimentación y en las prácticas artísticas renovadoras revolucionarias que rechazaban toda tradición academicista. Su desarrollo artístico fue evolucionando desde un postimpresionismo de características neo-primitivistas, pasando por un futurismo ruso con elementos cubistas, hasta llegar al suprematismo.
Inició su formación artística a los 18 años en la Escuela de Artes Aplicadas Stróganov de Moscú. En 1911 se instaló en San Petersburgo y comenzó a participar en exposiciones organizadas por la asociación “Unión de la Juventud” (Soyuz Molodyozhi).
Entre 1916 y 1918 formó parte del grupo “Supremus”, fundado por Malévich (1879-1935), donde también colaboró escribiendo textos teóricos.
Con la Revolución soviética de 1917, Olga Rozanova se implicó activamente en la organización de talleres de arte estatales, como la iniciativa Proletkult (Organización Cultural Proletaria). Durante su último año de vida inventó una variante del suprematismo que denominó Tsvetopis y escribió algunos artículos polémicos sobre la anarquía en el arte.
El 8 de noviembre de 1918 murió prematuramente con sólo 32 años a causa de una difteria.
Sus obras se conservan en el MOMA de Nueva York, el Museo Estatal Ruso en San Petersburgo, la Galería Treiakov y el Museo del Kremlin en Moscú, el Museo de Bellas Artes de Ekaterimburgo, el Museo Nacional Thyssen-Bornemisza de Madrid, el Museum Ludwig de Colonia, el Stedelijk Museum de Ámsterdam o el Museo Nacional de Arte de Ucrania.
