Tal día como hoy, el 24 de marzo de 1895, nació en Montevideo la pintora uruguaya Petrona Viera. Está considerada la primera mujer artista profesional de la República del Uruguay.
Fue hija de Feliciano Viera (1872-1927), presidente Constitucional de Uruguay entre los años 1915 y 1919.
Cuando Petrona Viera era una niña de sólo dos años de edad, sufrió una meningitis que la dejó sordomuda el resto de su vida. Este drama personal hizo que su familia enfocase su educación hacia la comunicación visual, fomentando los estudios de dibujo y pintura.
En su juventud recibió clases particulares del pintor catalán Vicente Puig (1882-1965), emigrado a Montevideo. Más tarde, fue el artista uruguayo Guillermo Laborde (1886-1940) quien se convirtió en su maestro y amigo íntimo. Fue Laborde quien introdujo a Petrona en el “Movimiento planista”, una modalidad de la pintura uruguaya desarrollada entre 1920 y 1930, cuyos principios defendían una técnica pictórica sintética, de planos recortados con colores vibrantes y luminosos.
El trabajo de Petrona Viera es una aproximación a la intimidad del microcosmos de la infancia mostrado con una mirada atenta y un gran lirismo. Muchos de sus cuadros representan escenas de juegos infantiles que tienen lugar en la cotidianeidad del entorno doméstico. Con el tiempo su pintura evolucionó hacia un tipo de paisajismo casi abstracto lleno de luz.
Falleció a los 65 años el 4 de octubre de 1960 en su ciudad natal.
La mayor parte de su obra se conserva en el MNAV, Museo Nacional de Artes Visuales de Montevideo, aunque también encontramos piezas en el Museo Blanes en Montevideo y Museo Olarreaga Gallino en Salto (Uruguay).
