Tal día como hoy, el 1 de agosto de 1912, nació en Bruselas la pintora surrealista Rachel Baes.
Fue hija del pintor Emile Baes (1879-1953), con quien mantuvo una difícil relación toda su vida.
Con sólo 17 años formó parte en 1929 de la exposición del Salón de los Independientes en París, donde mostró sus primeros trabajos de naturalezas muertas.
A mediados de los años 40 conoció al poeta francés Paul Eluard (1895-1952), posteriormente tomó contacto con René Magritte y a través de él se unió al grupo de pintores surrealistas belgas.
Rachel Baes representó en su pintura situaciones cargadas de un misterio inquietante, donde los personajes, casi siempre femeninos, protagonizan escenas sombrías y turbadoras.
En 1936 inició una relación sentimental con el líder fascista belga Joris van Severen (1894-1940), fundador del partido católico de extremaderecha "Verdinaso" (Verbond van Dietsche Nationaal- Solidaristen), quien fue asesinado por las tropas francesas durante la Segunda Guerra Mundial. Esta relación enturbió la reputación social y artística de Rachel Baes, quien tras la guerra se retiró completamente de la vida pública.
Desde 1961 Rachel Baes se instaló permanente en Brujas, donde murió en 1983 con 70 años. Fue enterrada en la ciudad francesa de Abberville junto a Joris van Severen.
Podemos encontrar su obra en los Koninklijke Musea voor Schone Kunsten van België en Bruselas y en numerosas colecciones particulares.
