Tal día como hoy, el 6 de abril de 1898, nació la pintora francesa Jeanne Hébuterne en la localidad de Meaux, antigua capital de la región de Brie.
Su familia se trasladó a París para que su hermano mayor, André Hébuterne (1894-1992), iniciara una carrera profesional como pintor. Fue él quien introdujo a su hermana en la comunidad artística de Montparnasse, donde ella primero trabajó como modelo para los pintores y más tarde comenzó su propia formación como artista en la Académie Colarossi.
En 1917, cuando Jeanne Hébuterne contaba 19 años de edad, su amiga la escultora rusa Chana Orloff (1888-1968) le presentó al pintor italiano Amedeo Modigliani (1884-1920), quien a partir de entonces convirtió a Jeanne en un motivo recurrente y obsesivo de su trabajo.
A pesar de la oposición de su familia, Jeanne se trasladó a vivir al estudio de Modigliani y al año siguiente nació su única hija, Jeanne Modigliani (1918-1984), que también se dedicó a la pintura.
Dos años después, el 26 de enero de 1920, Jeanne se suicidó saltando al vacío con sólo 21 años cuando se encontraba embarazada por segunda vez de Modigliani, quien había fallecido dos días antes a causa de una meningitis tuberculosa.
El trabajo creativo de Jeanne permaneció en la sombra durante décadas por decisión de su hermano André, que fue quien heredó legalmente las posesiones de su hermana, entre las que se encuentran bocetos, dibujos, acuarelas y óleos que nunca se han expuesto.
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